[Scene40:Sangre]
La chica intentó incorporarse para levantarse, pero las fuerzas le flaquearon. Torpemente y con mucho dolor, empezó a arrastrarse por el campo de flores en busca de sus padres. No estaban. La desesperación y la ansiedad empezaban a crecer en su interior. ¿Qué era lo que había ocurrido? ¿Dónde se encontraba? Abrumada y dolorida, se sentó para poder tomar aire, respirar y pensar. No reconocía el paisaje, sus padres no estaban a su lado, no oía soldados a lo lejos... empezó a darse cuenta de que sus peores temores se habían hecho realidad. El conjuro la había transportado a otra realidad, pero había dejado atrás a sus padres. Su intención era trasladar a los tres a varios kilómetros de distancia, a un lugar seguro. Se dejó caer hacia atrás mientras lloraba desconsoladamente. ¿Cómo iba a regresar? ¿Acaso era eso posible? Aun era una aprendiz de maga, no tenía todos los conocimientos necesarios como para salir de esa situación. Se encontraba en un mundo totalmente desconocido, ni siquiera estaba segura de que ese mundo estuviera habitado o de que hablasen su idioma. Sus temores anularon su capacidad de pensar. Se quedó tirada en el campo mientras atardecía, gastando sus últimas fuerzas llorando, mientras se desangraba lentamente.
A lo lejos, Taika escuchó unos murmullos y unas voces. Estaba tan destrozada que no tenía fuerzas ni siquiera para abrir los ojos. Estaba a punto de desmayarse.
- ¡Mira! Si que es una chica. - Dijo una voz masculina a lo lejos.
- Está herida, tiene mucha sangre en el hombro. - Respondió otra voz, ésta vez femenina, que se acercaba lentamente.
- Llevémosla a un hospital, pobrecita. - La voz masculina parecía realmente preocupada y se había acercado más. Taika quería abrir los ojos y ver quiénes eran aquellas personas, pero no aguantó más y se desmayó.
/ siguiente capítulo: Scene40: Hospital /
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