15 de junio de 2015

Grabado

Sigo trabajando en el blog de los relatos, pero hoy vengo a hablar de algo que no tiene nada que ver con las BJD.
Cuando hice Bellas Artes mi intención era especializarme en imagen (de hecho es lo que hice), pero obviamente, había un mínimo de créditos que había que elegir para sacarse la carrera y aunque hice todos los de la rama de imagen, no me bastaban. Tuve que escoger créditos extra. Hice alguno de la rama de dibujo que tenían que ver con la imagen en cierto modo (animación) y también hice tres de la rama de grabado. Al principio me daba mucho "miedo" esa rama, porque mi fuerte nunca ha sido el dibujo (si, lo se, y soy licenciada en Bellas Artes, shame on me xD). Pero me arriesgué porque me llamaba muchísimo la atención.
Primero escogí una asignatura de serigrafía y una de litografía. Esta última era insolando la plancha litográfica, por lo que podía usar fotografías. No me entusiasmó, la verdad. Aunque puede que fuera por la poca libertad que me daba la profesora para hacer lo que yo quería y el poco tiempo que tenía en clase para trabajar. Serigrafía en cambio me encantó. Tenía el punto justo entre pintura e imagen (también insolábamos las pantallas, por lo que podía trabajar con imagen). Me quedé con ganas de hacer más serigrafía, sin insolar la pantalla.
Luego escogí Monotipia, una técnica que consiste en crear una única estampa de una lámina. Esta técnica tiene poco de grabado y más de pintura. Me lo pasé pipa y llevo desde entonces con ganas de repetir.
Al haber rascado un poco la superficie de lo que era grabado, la verdad es que me entraron ganas de hacer más cositas, pero estaba acabando ya la carrera y no pude hacer más cosas. La verdad es que me arrepentí de no haberme atrevido antes, porque seguro que me lo habría pasado genial (no se si mis notas habrían sido igual de geniales, pero bueno xDD).

La cuestión es que de un tiempo para aquí me siento estancada con la fotografía, que es por lo que me metí en la carrera. Para crear proyectos hacen falta unos recursos que ahora mismo no tengo. Eso si, cada día tengo más ganas de abrir la puerta y dejar salir la creatividad que llevo dentro. De ahí que me apetezca tanto apuntarme a cosas como el Journal Viajero.
Es por eso que, un poco por arrebato y otro poco porque me lo pedía el cuerpo, me he puesto a hacer mis primeros pinitos en grabado con linóleo. Vengo de carvar sellos, que no es que sea lo mismo, pero al menos las gúbias las conozco y domino. Me falta práctica y no es que quede muy allá, sobre todo porque no tengo prensa y lo hago de forma casera. Me he mirado un montón de vídeos y artículos por internet de alternativas. Por ahora he probado un par de formas que dan bastante buen resultado.

También quiero retomar la monotipia y la serigrafía, aunque para la serigrafía tengo que comprar materiales (mi pantalla es demasiado grande y tengo que mandarla a limpiar :__D).

Quién sabe, igual dentro de un tiempo os voy enseñando mis progresos por aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Crystal -- Comments